20 de diciembre de 2018

Un Estado indolente ante la desaparición de Luzmila Ramírez

El 10 de octubre de 2016. 


Transcurre un nuevo día en el Ecuador; ya mismo cae la noche y con ella continúa cayendo la esperanza de los familiares de las personas a las que desaparecieron en este país. El caso de Luzmila Ramírez Suarez, oriunda de Quevedo y víctima de una macabra desaparición en Machala en manos criminales, es por decir lo menos infame en toda la extensión de la palabra. Una joven de 18 años de edad, excelente alumna de su colegio, sin embargo de padecer un porcentaje muy alto de deficiencia visual específicamente un 52% de discapacidad. Por lo señalado siempre debe estar en constante tratamiento médico específico y especializado.

Luzmila Ramírez desapareció el 10 de octubre de 2016.



Para cumplir su sueño de ser doctora en Medicina debió viajar a la provincia de El Oro para inscribirse en la Universidad de ese sector del país, pues con el famoso sorteo impuesto por las autoridades gubernamentales de la década pasada se le asignó un cupo en Machala después de haber alcanzado un puntaje de calificación de 826/100 en el Sistema Nacional de Nivelación y Admisión (SNNA), siendo exonerada inclusive del pre-universitario, en otras palabras con una hoja de vida estudiantil intachable. Y es así que, cumpliendo con esta labor para iniciar sus estudios superiores,  al momento de su inscripción en la Institución respectiva la desaparecen.  

A partir de este hecho, ocurrido el 10 de octubre del 2016 empieza el calvario para una sencilla y humilde familia. Su hermana, Alexandra Cevallos Suárez es quien hace frente a esta terrible pesadilla. Su familia, es quien la impulsa a continuar en esta lucha desigual frente a un aparataje estatal preconcebido, en teoría, para ayudar a sus habitantes, pero que en la realidad no son sino a través de sus representantes afines al tema, muy serios obstáculos para poder dar con el paradero de Luzmila. La historia de este caso no es sino una fotografía de la mayoría de casos de personas desaparecidas denunciados en el país:

 -Mal trato al momento de poner la denuncia. 

-Toda clase de estigmas sobre Luzmila, que fue desaparecida.

-Emiten, quienes reciben la denuncia, criterios y conceptos ruines sobre los familiares de Luzmila, increpándoles inclusive el hecho de por qué se permiten hacer que ella estudie una carrera tan cara y del por qué los otros hermanos de Luzmila se han dedicado a estudiar. 

-Concluía, el policía receptor de la denuncia en El Oro, en que Luzmila se debió haber ido con su novio o que se habría dedicado a la prostitución, pues él habiendo trabajado en Quevedo conocía “cómo eran las jóvenes de ese sector del país”. 

Qué clase de funcionarios habitan las instituciones afines al tema en el Ecuador. Son fieles representantes de lo más bajo que tiene la sociedad. 

-Hay elementos y hechos que pueden llevar a dar con el paradero de Luzmila y nadie quiere hacer nada. 

-Llenan papelería en la Fiscalía con un montón de acciones que dicen han efectuado, pero sucede que no dan con Luzmila. 

-Fiscales que siguen desfilando en este caso, es decir van de fiscal en fiscal. Gran estrategia para perder el tiempo. 

-Puro ofrecimientos de las más altas autoridades en Presidencia de la República, el ministerio del Interior, Fiscalía y la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased).

Resultado: Luzmila Ramírez no retorna a casa 

Hoy me encuentro haciendo el acompañamiento del caso de Luzmila, estamos empeñados en dar con su paradero. Invito a la sociedad a que se una a esta causa.
Basta, empresarios de la muerte y delincuencia, no pueden hacer criminales negocios con seres humanos. 




Atentamente:

Teodoro Posso
Derechos humanos de Luzmila Ramírez y familia
Cel: 099 5683140       TWITTER: @tposso       Correo: tepz2003@yahoo.com

Alexandra Cevallos Suárez.
Hermana de Luzmila Ramírez
Cel: 099 9408119       Correo:  alexandracevallos1987@hotmail.com



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