Nadie entiende mejor a los familiares de las personas
desaparecidas, que Miguel, un policía que también tiene a su hermano extraviado
desde el 2012.
Ninguno de los miembros de su familia ha podido estar en paz
desde el 28 de marzo de ese año. La última vez que lo vieron, un amigo suyo lo
recogió en el centro de Riobamba. “Dijo que se iba a comer y que volvía pronto,
no nos imaginamos que ese sería el último día que estaría a nuestro lado”, dice
afligido el uniformado.
Desde del día de su desaparición, poco se supo del joven que
hoy tendría 29 años. Las escasas pistas de su paradero han llevado a su madre a
recorrer ciudades como Guayaquil y Quito, y a emprender una desesperada
búsqueda con carteles y anuncios en los medios de comunicación.
Pero los esfuerzos han sido inútiles, no lograron obtener
más información del desaparecido. El policía recuerda con claridad el día que
sus superiores le informaron que sería transferido a la Unidad de Personas
Desaparecidas. Lo primero que pensó fue que esta sería una oportunidad para
dedicarse de lleno a investigar la desaparición de su hermano. Sin embargo,
desde que ingresó a su nuevo trabajo conoció otros casos similares al suyo que
le conmovieron profundamente.
De hecho, él es el primero en atender a las familias que
llegan a denunciar una desaparición. “Lo primero que les digo, es que no están
solos en su dolor y que ahora tampoco estarán solos en la búsqueda de sus seres
queridos. Es mi responsabilidad, mi deber ayudarles. No quiero que sufran como
yo”.
Un drama similar vive la familia Armas Orozco desde hace dos
años. Luz América salió de su casa para comprar un cilindro de gas y no
retornó. “El caso de mi hermana estaba cerrado según la Fiscalía, nos dijeron
que ya no se podía hacer nada. Cuando acudimos a la Policía encontramos nuevas
esperanzas. Hemos avanzado mucho en la investigación”, cuenta Ángel Orozco,
hermano de la desaparecida.
“Mi hijo es un ejemplo. Está dedicado a buscar a su hermano
y a la vez ayuda a las familias, estoy orgullosa de él”, cuenta la madre del
policía.
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