Elizabeth Rodríguez, madre de Juliana Campoverde. Foto: El Comercio |
Le contaron también los tropiezos que han padecido durante las investigaciones, según Mery Ardila, madre de la joven Carolina Garzón, desaparecida en Paluco, suroriente de Quito, en abril del año anterior.
Ella llegó al país para ayudar en la búsqueda que inició, en mayo de 2012, su marido Walter Garzón.
El grupo contó al presidente que su mayor problema es la rotación de los fiscales: un promedio de cuatro por cada investigación. La primera en intervenir fue Elizabeth Rodríguez. Ella es la madre de Juliana Campoverde, quien fue vista, por última vez, el 7 de julio de 2012, en el sur de Quito, cuando iba a su trabajo.
Correa se mostró preocupado "por la negligencia en la Fiscalía", dijo Ardila. Aunque también anunció un plan de recompensas para los desaparecidos. Los familiares pidieron que en el nuevo Código Penal se tipifique el delito de desaparición no forzada.
Parte del trabajo del Gobierno se concentrará en una unidad especializada. Ayer, en la Escuela Superior de Policía se presentó a los gendarmes que se incorporaron a esta Dirección. En total, son 246 agentes.
"La lucha contra el microtráfico y otros delitos como el secuestro, la extorsión, desapariciones, son las prioridades de la lucha contra el crimen y la violencia", dijo el ministro José Serrano. MCV
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